Todos en general, sobre todo si tenemos nuestro cerebro en relativo buen estado, hemos sentido en más de una ocasión vergüenza ajena por nuestros presidentes: Su poca preparación como oradores,…
Todos en general, sobre todo si tenemos nuestro cerebro en relativo buen estado, hemos sentido en más de una ocasión vergüenza ajena por nuestros presidentes: Su poca preparación como oradores,…