Los pobres, seres ilusos enviados a la tierra por Dios para darnos una imagen de lo que podría ser nuestra vida sin decencia ni trabajo, tienen afianzado en su corazón…
Es bien sabido que si el mundo estuviera compuesto, aunque fuera en un 50% por gente que valiera la pena, no estaríamos donde estamos. Hasta un 10% sería benévolo. Pero…